Fisura Anal

El estreñimiento crónico y el sobre esfuerzo produce hemorroides y fisuras en el recto cuando los tejidos anales se dañan. Una hemorroide es un conjunto de venas varicosas inflamadas en la capa interna del recto y del ano. Para saber si está aquejado de hemorroides externas debe ver si tiene una zona extensa de piel debajo del ano. Son venas dilatadas que se van ensanchando debido al esfuerzo y que son empujadas hacia afuera alrededor del ano. Las hemorroides externas se pueden tratar con medicamentos orales y ungüentos que se aplican localmente. Las hemorroides internas son más dolorosas y se producen en la unión del recto y el ano en el interior del cuerpo. Están cubiertas por una membrana mucosa que podría sobresalir del ano cortando el flujo de sangre.

Los pequeños desgarros en el revestimiento de la mucosa de la cavidad anal son los que producen las fisuras anales. El estreñimiento podría desgarrar las membranas de las paredes interiores del recto; como primeros indicios de un daño interno, los síntomas son deposiciones mezcladas con sangre o sangre en el papel higiénico. Aunque las fisuras suelen curarse por sí solas a lo largo del tiempo, pueden ser extremadamente dolorosas, especialmente al defecar. Para que la cicatrización sea más rápida existen algunos procesos sencillos como tomar analgésicos, esteroides y ungüentos con nitroglicerina para relajar el revestimiento del músculo debajo de la capa de mucosa dañada del ano. En casos graves, la fisura puede eliminarse quirúrgicamente por medio de un procedimiento conocido como "esfinterotomía lateral interna".

Síntomas de la Fisura Anal

Debe consultar con su médico si tiene los siguientes síntomas:
Experimenta un dolor intenso, fuerte o que pica dentro y alrededor del ano y que permanece horas después de defecar.
Observa gotas de sangre al hacer las deposiciones o en el papel higiénico.
Compruebe el tipo de sangre que evacua. Solo debe haber sangre a los lados o en el revestimiento exterior de las deposiciones. Esto es diferente a la sangre que se mezcla con las deposiciones que es un claro síntoma de enfermedad inflamatoria intestinal o de otras patologías graves.
Podría encontrar protuberancias en la piel conocidas como almorranas que se desarrollan debajo de la fisura, la mayoría en el borde del ano.
Los síntomas anteriores pueden ir a menudo acompañados de evacuaciones malolientes y prurito en el ano.

Causas de la Fisura Anal

Existen diferentes causas de las fisuras y debería reconocerlas de acuerdo con las siguientes razones:

La causa más común de las fisuras es el estreñimiento. En este estado, se desgarra el revestimiento anal y los músculos del esfínter quedan dañados debido al sobre esfuerzo y a unas deposiciones duras y secas.
Aplicar una presión más alta de lo normal en el esfínter anal, pasando un largo tiempo sentado durante la defecación (por ejemplo si se sienta en el inodoro a leer una revista o un periódico, etc.) también incrementa la presión en los músculos y con el tiempo, se debilitan y se desgarran con el mínimo esfuerzo.
Diarrea crónica, por la que se realizan deposiciones en intervalos de tiempo cortos y varias veces al día, añade presión a los músculos del esfínter y puede causar fisuras.
La inflamación de la zona anorrectal también es una causa.
Las infecciones de la piel que se encuentra alrededor del ano hace que esta sea susceptible a los roces y puede causar fisuras. Este estado puede prevalecer en casi todas las enfermedades de transmisión sexual como la sífilis.
Muchas mujeres desarrollan fisuras durante el último semestre de embarazo o durante el parto. Esto se produce por un aumento de la presión de los músculos del esfínter por el aumento de peso durante el embarazo y debido al esfuerzo que requiere empujar al bebé durante el parto.
Las inserciones realizadas a través del ano durante algunos reconocimientos médicos como el termómetro rectal, endoscopias, pruebas de ultrasonido o el extremo de un enema podrían dañar los tejidos del ano.
El coito anal también ejerce presión y puede causar fisuras.
Los pacientes con sistemas inmunitarios deficientes o con el virus del VIH son propensos a presentar fisuras.
Las personas que padecen algunas enfermedades como la diabetes, deficiencia de vitamina B6, fiebre, la enfermedad de Crohn, tránsito intestinal inflamatorio que causa diarrea con sangre son más propensas a sufrirlas.
La tuberculosis y el cáncer anal también las produce.
Algunas medicinas como el nicorandil puede causar daños en el ano.

Remedios para la Fisura Anal

Las fisuras anales sencillas tardan en curarse entre cuatro y seis semanas. Pueden sanar de forma natural usando unos sencillos remedios caseros. Sin embargo, es mejor consultarlo con el médico y, dependiendo de la gravedad de la situación, que sea él el que se los recete. Algunos de los remedios caseros más comunes para las fisuras son:

El requisito previo más importante para la curación es minimizar la presión en el ano al defecar e intentar controlar el dolor durante y después de las defecaciones. Esto se consigue cambiando la alimentación que permitirá una deposición más fácil. Evite el picante y los alimentos difíciles de digerir.
Hidrátese incluyendo muchos líquidos y fibra en su dieta.
Aplique aceite de coco, compresas de aloe vera y aceite de germen de trigo en las zonas afectadas para acelerar la curación. Estos productos caseros naturales cuentan con propiedades antisépticas y cicatrizantes.
Sentarse en agua caliente durante veinte minutos, tres veces al día puede proporcionar un alivio considerable. Esto es lo que se conoce como "baño de asiento". La temperatura cálida del agua minimizará las probabilidades de infección y mejorará la circulación de la sangre. Esto ayudará a la recuperación del músculo y a la cicatrización.
Es mejor que la zona esté seca para evitar infecciones y otros malestares como prurito y quemazón. Después de ducharse puede echarse polvos de talco de bebé pero evite los cosméticos perfumados o ásperos con la piel.
Limpiar el ano con toallitas suaves es mejor que usar papel higiénico. Esto disminuirá la irritación de los tejidos inflamados.
Limpie la zona un par de veces al día con una infusión de camomila y hamamelis que ayudará a los vasos sanguíneos a encogerse y a cicatrizar más rápido.
La emulsión de caléndula también ayuda a reducir el dolor y la irritación. Las cremas que contienen vitaminas A y D también se pueden aplicar en la zona del ano pero es mejor consultarlo con el médico para encontrar las composiciones que mejor le vayan.

Si en seis semanas la fisura no ha cicatrizado será necesario un tratamiento específico. Las fisuras se pueden curar teniendo en cuenta ciertas medidas de prevención y medicamentos:

Su médico puede recetarle un anestésico local como la lidocaína, un ungüento o supositorios para detener el dolor.
La crema de nitroglicerina con una composición de al menos el 0,2% permite que la fisura cicatrice reduciendo la presión en el esfínter. Esta crema ha de usarse en pequeñas cantidades ya que tiene efectos secundarios como desmayos por tensión baja, dolores de cabeza y mareos.
El trinitrato de gliceril es un ungüento rectal que mejora la circulación sanguínea del ano, relaja los músculos anales internos, reduce los espasmos y ayuda a que la fisura cicatrice rápidamente.
El Botox o la toxina botulínica causa adormecimiento momentáneo de los músculos. Esto está indicado para reducir la tensión de los músculos y ayudar a que la fisura cicatrice. Habría que inyectar el Botox en el esfínter del ano.
La nifedipina y el diltiazem también reducen la presión del esfínter anal bloqueando la entrada de calcio. Reciben el nombre de bloqueadores de calcio y están disponibles como ungüentos en gel además de medicamentos orales.
Si los medicamentos no mejoran su estado puede recurrir a procesos quirúrgicos para eliminar la fisura. Esto recibe el nombre de esfinterotomía lateral interna (LIS) que implica realizar un pequeño corte en el músculo interno del esfínter para aliviar la presión en el ano y detener los espasmos.

Dieta para la Fisura Anal

El tránsito intestinal depende de la alimentación. Asegúrese de llevar una dieta equilibrada saludable para evitar el estreñimiento, ablandar las deposiciones y regular el tránsito intestinal. Este es uno de los aspectos en los que la dieta tiene resultados de efecto directo, por lo tanto centre sus esfuerzos en modificar su alimentación. Esto hará que el doloroso proceso de paso de las deposiciones por la fisura sea más llevadero y acelere la cicatrización evitando más roces.

Incluya alimentos con alto contenido en fibra en su dieta diaria. Frutas, verduras, legumbres y gran variedad de granos son una buena elección. Esto ablandará las deposiciones, hará que el tránsito intestinal sea más fácil y disminuirá el esfuerzo de los músculos dañados.
Evite alimentos picantes y aquellos que sean difíciles de digerir ya que podrían causar más irritación y dificultades al defecar. Algunos ejemplos incluyen los pimientos, las palomitas, semillas frescas, etc.
La deshidratación puede causar también que las deposiciones se endurezcan así que tiene que beber mucha agua, zumos y líquidos a lo largo del día. Debería beber al menos de ocho a diez vasos de agua al día. El color de la orina puede ser un indicativo de deshidratación, en condiciones normales debería ser incoloro o amarillo claro.
Puede pedirle a su médico que le recete un suplemento de fibra diario si lo considera necesario.

Propuestas para la Fisura Anal

Ayuda hacer algo de ejercicio cada día. Debería realizar ejercicio moderado durante dos horas y media a la semana. Si no puede permitirse hacer ejercicios más rigurosos, con una hora y media a la semana ya sería suficiente.
Para aliviar la inflamación del tejido puede sentarse en una bañera llena de agua caliente durante media hora. Repita esta acción dos o tres veces al día. Este proceso ayudará a que los músculos del esfínter anal internos se relajen y cicatricen.

Referencias

Nelson RL, Thomas K, Morgan J, Jones A (2012). \"Non surgical therapy for anal fissure\". Cochrane Database Syst Rev 2: CD003431.