Mastitis Quística

La mastitis quística es un problema común en el que se encuentran masas de tejidos con bultos en los pechos. También se conoce como tejido glandular mamario. Un gran número de mujeres padecen mastitis quística en algún momento de sus vidas. Antes esta enfermedad se conocía como mastopatía fibroquística, pero dado que el problema es tan común y no es de naturaleza grave, ahora se conoce sólo como cambios quísticos mamarios o mastitis quística. Estos cambios mamarios pueden resultar en sensibilidad y dolor. Los bultos de la mastitis quística están presentes principalmente en las zonas superior y externa de los pechos. Los síntomas pueden agravarse antes de la menstruación. Los tratamientos naturales y las medidas de autocuidado normalmente son beneficiosos para tratar la mastitis quística.

Síntomas de la Mastitis Quística

Los síntomas más comunes de la mastitis quística incluyen:

Dolor de pecho
Sensibilidad
Masas o bultos en los pechos
Cambios del tamaño de pecho
Secreciones sin sangre de los pezones
Aumento del dolor y los bultos entre la ovulación y el inicio del periodo.

En la mayoría de casos, los cambios quísticos mamarios son normales. Sin embargo, si aparece un nuevo bulto o una zona más gruesa que persiste incluso tras la menstruación, es recomendable que le examine un médico. Debe ver a un médico también en caso de dolor quístico de pecho grave o creciente o si los bultos ya examinados han sufrido cambios.

Causas de la Mastitis Quística

Las causas exactas de la mastitis quística se desconocen, aunque se cree que las hormonas responsables de la reproducción, especialmente los estrógenos, juegan un papel importante. El examen microscópico del tejido quístico mamario muestra quistes llenos de líquido, tejido fibroso cicatrizado, crecimiento excesivo de las células en el revestimiento de los conductos de lecho y lóbulos mamarios hinchados. Las mujeres con mastitis quística no corren un riesgo alto de cáncer de mama a menos que haya un crecimiento excesivo de las células del revestimiento de los conductos de leche y los lóbulos mamarios. Esto se diagnostica normalmente tras una biopsia mamaria.

Remedios para la Mastitis Quística

La mayoría de casos de mastitis quística no precisan ningún tratamiento, especialmente si no hay síntomas. Sin embargo, si los quistes causan incomodidad o si son muy grandes, su médico puede remitirle a un mastólogo para un procedimiento de aspiración aguja fina. Este tratamiento para la mastitis quística es muy efectivo para reducir rápidamente el dolor ya que se usa una aguja fina para drenar los quistes y esto reduce la presión de las zonas subyacentes inmediatamente. En casos raros, puede ser necesaria cirugía para eliminar quistes tenaces que resisten incluso tras la aspiración. Su médico puede recomendarle una crema AINE o analgésicos si tiene un dolor moderado. En algunos casos, también se receta anticonceptivos orales ya que ayudan a reducir los cambios hormonales que causan la mastitis quística.

Algunos remedios de autocuidado para la mastitis quística incluyen los siguientes:

Evite consumir bebidas con cafeína, alcohol, té y refrescos ya que contienen ciertos químicos que pueden disparar la liberación de hormonas del estrés en el cuerpo. Estas hormonas pueden asociarse a la sensibilidad de los pechos y los bultos. Algunos estudios han demostrado que las mujeres que han dejado de consumir estos líquidos han experimentado síntomas reducidos.
Las compresas con hielo son muy efectivas para aliviar el dolor y la sensibilidad. Ponga algunos cubitos de hielo o hielo molido en una bolsa de plástico, túmbese y coloque la compresa fría sobre el pecho afectado durante unos diez minutos. También puede usar una bolsa de guisantes congelados. Puede intentar aplicar una compresa caliente durante 30 minutos y después una compresa fría durante diez minutos. Se sabe que estos tratamientos alternativos ayudan a aliviar la incomodidad del dolor de la mastitis quística.
Coloque hojas de col frías sobre el pecho inflamado durante la noche. Esto ayudará a reducir la inflamación y a aliviar el dolor.
Las verduras del mar como las algas marinas y el nori son ricas en yodo. Algunos estudios indican que las mujeres con déficit de yodo pueden ser propensas a desarrollar bultos en los pechos. Estas verduras se consiguen fácilmente en mercados de alimentos y debe incluirlos en su dieta regular. También puede encontrarlos en polvos que puede usar como sustitutos de la sal.
La retención de agua normalmente ocurre durante el ciclo menstrual y esto puede provocar que los pechos se vuelvan pesados y sensibles. La sal puede agravar la hinchazón y empeorar la incomodidad. Evite o al menos reduzca la ingesta de sal durante un par de semanas antes de su periodo. Evite también los alimentos procesados ricos en sal.
Las compresas templadas son beneficiosas para reducir la hinchazón y el dolor de los pechos. Si no tolera las bolsas de hielo, las compresas templadas son ideales. Moje una toalla de cara en agua caliente y colóquela sobre el pecho afectado durante unos minutos. También puede usar una compresa de calor. Un gran remedio casero para la mastitis quística es una bolsa de arroz. Para hacer una bolsa de arroz, llene un calcetín grueso limpio con arroz crudo. Ate la apertura y caliéntelo durante 30 segundos en el microondas. Colóquelo sobre su pecho tras comprobar la temperatura.

Masajee el pecho afectado con aceite de jengibre diluido. Utilice después una compresa caliente para reducir los bultos y el dolor.

Las investigaciones indican que los aceites esenciales grasos pueden ser de ayuda para aliviar los síntomas de los cambios quísticos mamarios. El aceite de prímula es una buena fuente de linóleos, un ácido graso esencial. Sin embargo, es importante consultar con su médico antes de tomar cualquier suplemento.
Algunos estudios han demostrado que la vitamina A puede ayudar a reducir el dolor de pechos. Tenga en mente que las dosis altas de vitamina A pueden causar toxicidad en el cuerpo ya que se almacena en el cuerpo y no se elimina. Por tanto es preferible incorporar beta-caroteno en la dieta. El beta-caroteno se convierte en vitamina A en el cuerpo. Las frutas y verduras de color naranja, rojo y amarillo tienen un alto contenido en beta-caroteno. Dado que el beta-caroteno se disuelve en agua, cualquier cantidad excesiva puede eliminarse del cuerpo fácilmente.
La vitamina E es beneficiosa para aliviar el dolor y sensibilidad de los pechos. También puede ayudar a reducir el tamaño de los bultos mamarios. Puede conseguir esta vitamina en nueces, verduras de hoja verde, cereales enriquecidos y aceites vegetales. También puede consultar con su médico acerca de la ingesta de suplementos de vitamina E.
La hierba dong quai es conocida por ayudar a equilibrar los niveles hormonales y puede ayudar a reducir la incomodidad de pechos.
Tome un poco de camomila, milenrama y flores de caléndula y añádalas en agua. Hiérvala, escúrrala y después moje un trapo limpio en la solución. Colóquelo sobre los pechos para tratar la dolorosa mastitis quística.

Dieta para la Mastitis Quística

La dieta para la mastopatía quística debe incluir los siguientes alimentos:

Verduras: Los pepinos, el perejil, la col y otras verduras funcionan como diuréticos naturales que ayudan a eliminar el exceso de líquidos del cuerpo. Éstas son una mejor alternativa a los diuréticos comerciales que también pueden disminuir sus niveles de potasio y provocar un desequilibrio en los niveles de electrolitos. Los diuréticos comerciales también pueden afectar a la producción de glucosa.
Cereales integrales: La fibra está presente en cantidades sustanciales en los alimentos de cereales integrales como el arroz integral y el pan integral. La fibra ayuda a prevenir las fluctuaciones de los niveles hormonales que son principalmente responsables de los cambios quísticos mamarios. También se encuentra fibra en frutas y judías.
Pescado: Los beneficiosos ácidos grasos omega-3 se encuentran en pescados como la caballa, la trucha y el salmón. Éstos son ricos en yodo y por tanto ayudan a prevenir la formación de bultos mamarios. Incluya una cantidad moderada de estos pescados en su dieta.
El ajo, los champiñones y la cebolla estimulan la oxigenación de las células y esto ayuda a solucionar los cambios quísticos mamarios.
La vitamina B6 ayuda a regular los niveles hormonales del cuerpo y puede encontrarse en alimentos como el ajo, el salvado y el pistacho.

Evite las ingestas elevadas de carne ya que se inyectan hormonas a la mayoría de aves y de carne. Esto puede alterar su equilibrio hormonal especialmente durante la menstruación. Si desea incluir carne en su plan dietético para la mastitis quística, opte por aves y carne libres de hormonas que normalmente se pueden conseguir en tiendas de alimentos saludables.

Sugerencias para la Mastitis Quística

A continuación encontrará algunos consejos que le ayudarán a tratar los cambios quísticos mamarios:

Lleve un sujetador que le encaje bien y le ofrezca un soporte adecuado para los pechos. Esto aliviará la sensibilidad y la pesadez. Compre un sujetador de mayor talla si encuentra que sus pechos se han hinchado antes de la menstruación.
En caso de que experimente sensibilidad en los pechos por primera vez, haga una prueba de embarazo ya que la hinchazón y la sensibilidad son algunos de los primeros síntomas del embarazo.
Haga ejercicio regular y siga una dieta baja en grasa. Esto ayudará a mantener un peso corporal ideal. El exceso de grasa provoca un aumento de niveles de estrógenos y esto puede disparar los cambios en los pechos. Las mujeres con sobrepeso son más propensas a la incomodidad de los pechos.
Evite fumar ya que puede empeorar el dolor y la sensibilidad en los pechos.
Los remedios herbales y los productos de cuidado de la piel que contienen ginseng pueden imitar los efectos de los estrógenos y por tanto es recomendable dejar de usarlos.