Infecciones Vaginales
La salud sexual puede ser un tema delicado, porque hay muchos individuos que se sienten incómodos con este tema. Por lo tanto, enfrentar cualquier clase de infección o dolencia que afecte a los genitales puede ser mucho más delicado. Ya sea que usted se sienta o no incómodo, es importante no desatender ninguna infección o anormalidad que afecte la región. Las infecciones vaginales son muy comunes en la mayoría de las mujeres, e involucran normalmente la inflamación, y se les conoce como vaginitis. La mayoría de las infecciones vaginales causan inflamación y otros síntomas tales como olor desagradable, secreciones y comezón. La vaginitis puede presentarse debido a varios factores y a menudo es difícil diagnosticar este padecimiento. Las infecciones vaginales generalmente no son serias, de manera que trate de no preocuparse. Al mismo tiempo es importante que no la desatienda. Existen una variedad de medicamentos que se adquieren sin receta médica que pueden ayudar a tratar las infecciones vaginales. Si los medicamentos que no requieren de receta médica y los remedios caseros para las infecciones vaginales no dan resultado en pocos días, sería aconsejable solicitar la atención médica.
Síntomas de las Infecciones Vaginales
Los síntomas más comunes de las infecciones vaginales son la comezón y el ardor dentro y alrededor de la vagina. También es probable que se presenten secreciones vaginales. Cierta cantidad de secreción vaginal se presenta normalmente en mujeres en edad de dar a luz. Las glándulas en el cuello del útero producen una secreción que viaja hacia abajo y arrastra las bacterias y las células vaginales muertas. Esto puede causar que la secreción mucosa se vuelva ligeramente blanca o amarillenta. La cantidad de secreción mucosa de las glándulas cervicales varía a lo largo del ciclo menstrual dependiendo de la producción de estrógeno. La secreción vaginal también puede presentarse durante periodos de tensión o de excitación sexual. En tales casos es probable que la secreción sea clara. En caso de que exista una secreción vaginal de un color anormal junto con olor fétido y cambie en textura y consistencia, podría ser indicio de una infección vaginal.
Las infecciones vaginales causadas por bacterias o por vaginosis bacteriana dan como resultados una secreción blanca o gris que tiene un olor característico a pescado. La secreción puede notarse especialmente después de tener relaciones sexuales. También puede presentarse comezón o ardor alrededor de la vagina. También es posible que la vaginosis bacteriana no produzca ningún síntoma.
Otro tipo de infección vaginal es la infección por levaduras. La comezón junto con una secreción espesa y blanquecina son los síntomas más prominentes de la infección por levaduras. También es posible que se experimente dolor al momento de orinar y durante las relaciones sexuales. La infección por levaduras puede afectar también a los hombres y traer como resultado comezón en el pene. La tricomoniasis tiene como resultado una secreción vaginal verdosa o grisácea que también aparece con textura espumosa. Existe la probabilidad de que se presente comezón, ardor e irritación dentro y alrededor de la vagina. También puede presentarse un fuerte olor por la secreción, y dolor al orinar y al tener relaciones sexuales. La tricomoniasis es una infección de transmisión sexual y los síntomas se perciben a menudo entre 4 y 20 días después de la exposición.
Un padecimiento conocido como vulvodinia puede traer como resultado punzadas y escozor en los genitales sin ninguna infección. Este padecimiento debe tratarse de manera diferente a las infecciones vaginales.
Síntomas de las Infecciones Vaginales, Causas, Remedios y Dieta
Causas de las Infecciones Vaginales
La causa más común de las infecciones vaginales son las bacterias. La vaginosis bacteriana se desarrolla cuando hay un desbalance en los niveles de bacterias que se encuentran normalmente en la vagina. Las mujeres embarazadas y aquellas que practican con frecuencia la ducha vaginal pueden tener mayor riesgo de desarrollar esta infección. El uso de dispositivos intrauterinos también es un factor de riesgo. Tener muchas parejas sexuales o relaciones sexuales con una nueva pareja puede volver a una mujer propensa a la vaginosis bacteriana. Las mujeres que nunca se han involucrado en relaciones sexuales no es probable que se vean afectadas. La vaginosis bacteriana no se propaga en piscinas, ropa de cama ni en los asientos de los inodoros.
Las infecciones por levadura son causadas por el hongo que se conoce como candida albicans. Puede propagarse a otras áreas del cuerpo tales como la piel y las membranas mucosas. En individuos con un sistema inmunológico débil, la infección podría arriesgar su vida. Las infecciones por levadura son sumamente comunes y no se transmiten durante las relaciones sexuales. Son el resultado de cuando existe un excesivo crecimiento de hongos en la vagina. Bajo circunstancias normales la actividad fungal permanece equilibrada por las bacterias que se encuentran presentes, pero cuando el balance se pierde, se desarrollan los problemas. Los niveles de bacterias pueden verse afectados por la ingestión de antibióticos. El crecimiento fungal es probable que se presente incluso durante el embarazo o en mujeres con diabetes. Otros factores que podrían afectar el balance de bacterias y hongos en la vagina incluyen el uso de píldoras anticonceptivas, el uso de esteroides, diabetes, inmunidad débil, cambios hormonales y el uso de productos perfumados para la higiene femenina. El crecimiento fungal puede ser excesivo incluso si hay rasguños en la región. Esto puede pasar cuando se inserta un tampón. La tricomoniasis es causada por un parásito que se propaga al tener relaciones sexuales.
Remedios Caseros y Curas Naturales para las Infecciones Vaginales, Preguntas y Respuestas
Remedios contra las Infecciones Vaginales
La diagnosis de las infecciones vaginales se hace normalmente después de un análisis de cultivos vaginales y de la orina. El tratamiento dependerá del organismo que está causando el problema. El tratamiento también se ve influenciado por el tipo de vagintis, severidad, duración y recurrencia de la infección. Para las mujeres embarazadas es posible que se prescriban diferentes tipos de medicamentos.
La vaginosis bacteriana se trata con medicamentos antibióticos en forma de píldoras o aplicaciones tópicas. Sin embargo, es posible que la infección se repita incluso después de un tratamiento exitoso. En tales casos se prescribe entonces el medicamento antibiótico por otra vía. Existen también algunos remedios caseros que pueden ayudar a aliviar los síntomas de la vaginosis bacteriana. El paso más importante cuando se enfrenta uno con una infección vaginal es asegurarse de contar con una buena higiene. Es aconsejable lavar el área con frecuencia utilizando un jabón suave. Tenga cuidado de no permitir la transferencia de gérmenes del área anal cuando haga el lavado. También evite vestir pantalones ajustados pues esto podría agravar el padecimiento. La ropa interior de algodón que sea cómoda permitirá la circulación, evitando que haya una acumulación excesiva de humedad y calor. También es necesario lavar la ropa interior adecuadamente para eliminar la generación de gérmenes. Una buena forma de favorecer la curación de una infección bacteriana es envolver un diente de ajo en manta de cielo para formar un pequeño tampón. La tela puede atarse con hilo dental no encerado. Inserte esto dentro de la vagina y déjelo toda la noche. Esto puede hacerse una vez al día hasta que la infección desaparezca. Otro remedio natural popular es el vinagre de manzana para las infecciones vaginales. Combine una cucharadita de vinagre de manzana con dos tazas de agua y agregue un diente de ajo fresco. Permita que la solución repose por algún tiempo y después empléela para el lavado vaginal. También pueden introducirse cápsulas de ácido bórico dentro de la vagina para aliviar los síntomas de la infección. Sin embargo al principio puede existir cierto ardor.
Los médicos normalmente prescriben comprimidos o supositorios vaginales antifungales contra las infecciones por levaduras. Esto es porque se sabe que los medicamentos orales pueden tener como resultado ciertos efectos secundarios tales como náusea, dolor de estómago y dolor de cabeza. Los medicamentos orales tampoco se prescriben en el caso de las mujeres embarazadas. Un remedio casero popular contra las infecciones por levadura es sumergir un tampón en yogurt e introducirlo dentro de la vagina. Esto puede hacerse dos veces al día hasta que los síntomas disminuyan. Los cultivos vivos de lactobacilos presentes en el yogurt natural ayudan a corregir el desbalance de bacterias y hongos en la vagina. El aceite del árbol de té se sabe que también ayuda a reducir los síntomas de comezón e irritación causados por la infección por levadura. Vierta unas cuantas gotas del aceite en un tampón y colóquelo dentro de la vagina. También puede agregar una cucharadita de sorbato de potasio a una taza de agua y permitir que se disuelva. Después introduzca el tampón y vierta la solución de manera que sea absorbida por el tampón. Esto puede repetirse durante varias noches hasta que la infección desaparezca.
Debido a que la tricomoniasis se confunde a veces con otras enfermedades de transmisión sexual o con infecciones bacterianas, es elemental un diagnóstico apropiado. La tricomoniasis se trata con antibióticos en forma de medicamentos orales o aplicaciones tópicas. Los individuos afectados con este padecimiento deben evitar tener relaciones sexuales hasta que el tratamiento concluya y todos los síntomas hayan desaparecido. Las curas naturales para la tricomoniasis incluyen la ingestión de probióticos o bacterias amigables que contienen el yogurt y los alimentos fermentados. Se sabe que éstos combaten a los parásitos que causan la tricomoniasis. Los remedios herbales contra la tricomoniasis incluyen el uso de Echinacea la cual tiene propiedades naturales para aumentar la inmunidad. También es anti-microbiana y anti-bacteriana por naturaleza. El goldenseal (hydrastis canadensis) ayuda también a destruir las bacterias que causan la infección. El ajo es un poderoso agente antibacteriano y ayuda a combatir a los parásitos. Puede agregarse a los alimentos o bien consumirse en forma de comprimidos. El extracto de cardo es otra sustancia popular que se utiliza ampliamente para eliminar las toxinas del cuerpo. El árbol de té también es benéfico en la tricomoniasis y puede aplicarse a la vagina en forma diluida. Es aconsejable consultar a un médico antes de emplear cualquier remedio de la herbolaria.
Infecciones Vaginales: Remedios Caseros Sugeridos por los Usuarios
Dieta en las Infecciones Vaginales
No existe una dieta específica para las infecciones vaginales. Pero efectuar cambios saludables a su dieta diaria puede ayudar a mantener el cuerpo en forma y resistente a diferentes tipos de enfermedades e infecciones. Incluya en la dieta muchas frutas frescas, verduras y alimentos ricos en fibra. También reduzca la ingestión de azúcar ya que el exceso de esta sustancia puede afectar la inmunidad. Se sabe que la vitamina A y la vitamina E ayudan a tratar la tricomoniasis y con frecuencia los médicos prescriben complementos multivitamínicos. El yogurt natural es también extremadamente saludable y que es recomendable agregar a su dieta normal, pues puede ayudar a prevenir varias infecciones fungales.
Sugerencias para las Infecciones Vaginales
Con el fin de proteger el cuerpo de las infecciones vaginales, es aconsejable evitar el uso de tampones o toallas femeninas con desodorante. Si se va a involucrar en alguna actividad física rigurosa o si estará fuera de su casa durante un largo periodo, puede ser una buena idea llevar otro juego de ropa, pues permanecer en prendas sudadas o sucias puede agravar la infección.